Historietas
ANFERNY PALACIOS
Tercer lugar
11 años 

Anferny Palacios se expresa a través de sus cómics

Por: Carlos Suniaga | Bolívar | El Pitazo

Anferny Palacios, un niño de 11 años residente del estado Bolívar, durante el confinamiento dibujó su vivencia con originalidad y humor para el concurso La escuela que es mi casa. Hoy en una entrevista cuenta cómo ha sido su experiencia durante el encierro y cómo se imagina al mundo cuando acabe la pandemia

                                                                 
 Yo estaba con mi papá, y de repente, mi mamá me llama y me dice: '¡Anferny, ganaste!'. Comencé a saltar, estaba muy emocionado. Yo participé con muchas ganas porque quería que todo el mundo viera mis cómics”, relata el pequeño dibujante .  


La habilidad que tiene Anferny Palacios para dibujar es excepcional. Él puede hacer un retrato en blanco y negro en 30 minutos o crear un cuadro multicolor de su inspiración en una noche. Su talento resaltó y ganó el tercer lugar de la categoría historieta en el concurso La escuela que es mi casa, una iniciativa de El Pitazo y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

Tiene 11 años y vive en la parroquia Unare de Puerto Ordaz. Una maestra de su colegio lo motivó a concursar, y él, sin pensarlo demasiado, dijo que sí, porque era la oportunidad de contar una historia como le gusta: dibujar. Luego, cuando supo que ganó, la emoción fue incontenible.

“Yo estaba con mi papá, y de repente, mi mamá me llama y me dice: '¡Anferny, ganaste!'. Comencé a saltar, estaba muy emocionado. Yo participé con muchas ganas porque quería que todo el mundo viera mis cómics”, relata el pequeño dibujante. Le brillan los ojos al hablar, como si reviviera aquel momento.

Anferny dibujó la forma como cambió su vida durante la cuarentena y lo que él espera que pase cuando el coronavirus deje de ser una pandemia. Con trazos de creyón gris y un toque de humor, se ilustró con su mejor amigo, Luis, yendo juntos al colegio. En la puerta de la escuela los esperaba su maestra, y en el salón, sus demás amigos. Es el futuro inmediato que desea vivir.  

“Cuando me dijeron que no podíamos salir más de la casa me asusté, porque me gusta el colegio; siento que aprendo mucho. Antes de toda la pandemia podía ser libre de hablar con mis amigos sin tapabocas”, comenta.  


Pasión por los cómics 

Anferny dice que desde que se levanta de la cama solo piensa en hacer trazos y ponerles color. Y su mayor inspiración son series de caricaturas o películas de superhéroes. “Todas las mañanas me levanto a dibujar, a hacer cómics. A veces es medianoche y sigo dibujando, y mi mamá me tiene que decir que ya es hora de acostarnos”, relata mientras se ríe a carcajadas.

A sus ilustraciones estampa su firma personal, que ha llamado Max Cómics. Con esa identificación quiere que se conozcan sus obras. Desea entrar en alguna academia y seguir perfeccionando su técnica, y hasta tiene en mente una empresa editora de cómics.

Anferny es el orgullo de su mamá, Ángela Rodríguez, quien se emociona al hablar de él y agradece a El Pitazo y UNICEF por la iniciativa del concurso que les brindó la oportunidad a cientos de niños de toda Venezuela de expresarse de distintas formas.

“Para hablar, Anferny se pone un poco nervioso, pero pintando no hay nadie que lo detenga. Su manera de expresarse es dibujando”, asegura la orgullosa madre.